RECOLECCIÓN EN MI HUERTO DE BANCALES

 

Qué satisfactorio es ver crecer lo que has plantado. Suena a tópico, pero realmente sientes las endorfinas atravesando tu cuerpo cuando llegas al huerto y ves que las plantas están más grandes. Piensas que sin ti no existirían, que el hecho de que estén ahí es gracias a ti, y el orgullo propio te atraviesa como una varita mágica de felicidad.

Después llega el momento de recolectar, de dar sentido a todo el trabajo y ese momento se convierte en el mejor de todos. Literalmente saboreas el fruto de tu trabajo y por fin confirmas que el esfuerzo ha merecido la pena.

Animo a cualquieras que tenga un trozo de tierra a que se anime a plantar algo, simplemente por probar. Yo empecé así, con un solo bancal donde puse toda mi ilusión. Poco a poco he visto que ha merecido la pena, que es divertido y que más halla del resultado, lo importante es mancharse las manos con tierra y disfrutar.

Para poner un bancal solo hace falta tener un espacio libre en un jardín, o incluso en un patio. No hace falta que el especio sea de tierra, encima de un solar de cemento también se puede poner un bancal sin problema. Las plantas solo necesitan un buen sustrato, sol, agua y un poco de cariño. Para empezar lo mejor es comprar las plantas ya preparadas para plantarlas, el tema de los semilleros es un mundo más complicado que dejaría para una segunda fase futura.

Si de verdad estas interesada te animo a que visites esta web https://www.lahuertinadetoni.es/. Toni es genial, te lo explica todo con pelos y señales mediante videos de Youtube. Aprenderás a fabricar un bancal desde cero, a elegir el sustrato adecuado y seleccionar las plantas adecuadas para cada estación del año.

Yo ahora mismo ya tengo tres bancales en marcha y mi idea es llegar a tener doce para la primavera. Sé que el trabajo aumentará, que cada vez constará más tenerlos libres de plagas y malas yerbas, pero lo voy a intentar.